Agricultores que labran el futuro del país

• El esfuerzo conjunto de muchos actores de la sociedad ha permitido que cada vez menos personas sufran hambre y desnutrición en nuestro país y en el mundo.
• Este premio reconoce el gran aporte que hacen los agricultores familiares a la nación, y lo hacemos en honor al profesor Juan Bosch, que fue el primero en otorgar a quienes cultivan la tierra, el lugar que les corresponde.
• Estoy convencida de que promover la agricultura familiar es crear un mundo con mayor igualdad social.

Mis queridas amigas y amigos:

Por decenas de años, el mundo ha vivido asustado ante la posibilidad de una hambruna que acabe con la vida de sus habitantes.

No es la trama de una película. El hambre es una realidad que por mucho tiempo ha quitado el sueño a millones sobre la faz de la tierra.

Afortunadamente, el panorama ha mejorado en las últimas décadas. El esfuerzo conjunto de muchos actores de la sociedad, ha permitido que cada vez menos personas sufran hambre y desnutrición en nuestro país y en el mundo.

Y un pilar esencial para alcanzar ese objetivo es la agricultura familiar.

Sembrar la tierra con amor, dedicación y entrega, es uno de los actos de solidaridad que más nos caracteriza como seres humanos.

Eso es lo que hacen nuestros agricultores, ya sea en su pequeño conuco o en sus huertos familiares y comunitarios.

Los agricultores que impregnan de amor a la tierra, cosechan los frutos necesarios para sus familias y su comunidad.

Esa loable acción la queremos reconocer aquí hoy.

Reconocer a los hombres y mujeres que hacen de cada semilla, de cada planta y de cada cosecha, un modo de vida digno de ser reconocido, por ser ejemplos de valores para los dominicanos y las dominicanas.

La tierra es bondadosa con ellos.

Con su siembra ustedes promueven la solidaridad y se convierten en un vivo ejemplo de cómo los huertos familiares contribuyen a la mejora en la calidad de vida de las personas, aseguran una alimentación sana, auto sostenibilidad, integración familiar, desarrollo de capacidades, protección del medio ambiente y apoyo a la comunidad.

Por eso, estoy convencida de que promover la agricultura familiar es crear un mundo con mayor igualdad social.

Es un paso certero que nos acerca cada vez más al objetivo de salvaguardar la seguridad alimentaria, para que las generaciones actuales y futuras tengan acceso a alimentos.

Nuestros agricultores, con sus manos, están labrando el porvenir de nuestro país, cultivando esperanza para nuestra nación.

Este premio reconoce justamente, el gran aporte que hacen los agricultores familiares a la nación, y lo hacemos en reconocimiento a un presidente y líder de nuestro país, que fue el primero que otorgó a quienes cultivan la tierra, el lugar que les corresponde. Me refiero al profesor Juan Bosch.

Hoy premiamos a familias agricultoras que mantienen su constancia y son ejemplos de valores éticos, morales, al igual que nuestro profesor Juan Bosch.

Hoy les agradecemos y motivamos, para que continúen siendo hombres y mujeres de bien, y sigan adelante siendo ejemplo para sus hijos y vecinos.

Con gran orgullo, les impulsamos a continuar dejando marcas de amor y perseverancia en todo el país.

Sigan arando progreso, cobijados por el sol de la esperanza y aportando su sabiduría.

Juntos, vamos a cosechar una mejor República Dominicana.

Dios les siga bendiciendo.