Matemáticas divertidas; motivando a nuestros estudiantes
Las matemáticas tienen una reputación de ser la materia menos preferida o la más difícil para muchos estudiantes. Para muchos, las matemáticas pueden ser aburridas, abstractas, complejas o difíciles de entender. Esto se debe, en parte, a que los estudiantes no ven la diversión y aplicabilidad de las matemáticas en escenarios de la vida real. La falta de motivación puede causar desinterés y pérdida de una habilidad que es tan importante como necesaria para el futuro y progreso de nuestros jóvenes.
Debemos incentivar de manera creativa a los niños para que descubran el uso de las matemáticas aplicadas a la vida cotidiana y cambien la frustración por la diversión.
Las matemáticas nos ayudan a resolver problemas de todo tipo ya que nos hacen desarrollar la habilidad de pensar analíticamente y potenciar nuestras capacidades de razonamiento.
Debemos incentivar de manera creativa a los niños para que descubran el uso de las matemáticas aplicadas a la vida cotidiana y cambien la frustración por la diversión. Alentar a sus hijos a desarrollar sus músculos mentales para las matemáticas ayuda a construir bases sólidas para su vida académica y profesional.
¿Pero qué se puede hacer para asegurar que los niños vean lo divertidas y útiles que las matemáticas pueden ser?
- Aprende jugando
Hay que animar a los niños a ver las matemáticas como un juego divertido en lugar de trabajo escolar. Los juegos pueden ayudar a los estudiantes a practicar esta materia sin siquiera darse cuenta.
Desde la vicepresidencia de la República queremos motivar a los niños a encontrar el sentido de la diversión en las matemáticas. Por esta razón creamos la plataforma Matemática Divertida, una página web interactiva para niños y niñas de 1° a 6° curso de primaria, maestros, padres y tutores. En el portal podrán encontrar los recursos adecuados para que los niños puedan aprender matemáticas de manera dinámica y gratuita. El portal (www.matematicadivertida.do) ofrece numerosos juegos, videos y actividades interactivas dirigidas a niños de diferentes niveles educativos. Las actividades van de acorde a la edad de cada niño, lo que facilita su motivación, permite que desarrollen competencias y eleven su nivel actual de desempeño.
- Resolver problemas de matemáticas de la vida real fuera de la escuela
Incorporar las matemáticas en actividades de su día a día ayuda a que los niños entiendan y usen los números y otras ideas matemáticas en la vida cotidiana. La idea es abordar las matemáticas con un sentido de diversión e intentar incluir la resolución de problemas en conversaciones diarias con los niños; incluso puede intentar algunas de las siguientes estrategias:
- Contar todo: la mejor manera de construir el sentido numérico es añadiendo el conteo a la rutina diaria. Contar el número de juguetes en su cuarto, el número de personas en la tienda o cualquier otra cosa que se te ocurra.
- Cocinar juntos: la cocina es un lugar donde puedes aplicar distintos conceptos matemáticos básicos. Puedes preparar una receta utilizando medidas, fracciones y conteos.
- Medir el tamaño de distintos objetos: puedes hacer comparaciones sobre el tamaño de diferentes objetos, preguntando cuál es más grande y cuál más pequeño, o qué grupo tiene más y cuál menos. También se puede comenzar a usar una regla para medir y practicar la medición.
Tu objetivo debería ser usar las matemáticas como una herramienta para enseñar al niño a cómo pensar, razonar y formular nuevas soluciones ante problemas e ideas desafiantes en su día a día.
- Despierta su curiosidad
La curiosidad hace que el proceso de aprendizaje sea más efectivo y agradable. Los alumnos que logran despertar su curiosidad por las matemáticas suelen ser los más exitosos en la materia ya que no sólo hacen preguntas, sino que también buscan activamente las respuestas.
Sin embargo. muchos niños pierden su sentido de curiosidad al sentirse frustrados ante las matemáticas. Debemos enseñarles a los niños a valorar el proceso de aprendizaje haciéndoles saber que está bien equivocarse. Necesitamos transmitirles que los fracasos, no son un juicio sobre su capacidad o talento, sino una oportunidad para crecer y mejorar.
Cuando los niños logran entender que las matemáticas son un proceso y que requieren de práctica constante, se abre la posibilidad de despertar su curiosidad, evitando que la frustración interrumpa su aprendizaje.
Promovamos las matemáticas divertidas y hagamos de nuestros estudiantes los más destacados a la hora de aprender.
