La industria turística en tiempos de COVID-19
La pandemia causada por el coronavirus ha tenido un enorme impacto en la industria turística a nivel mundial. Según un informe de las Naciones Unidas en los primeros cinco meses del 2020, la llegada de turistas internacionales a las diferentes naciones, disminuyó a más de la mitad y se perdieron unos 320.000 millones de dólares en exportaciones de turismo.
En ese sentido, el Secretario General de las Naciones Unidas, António Gutiérrez, ha expresado su preocupación por la reconstrucción del sector en varias ocasiones, asegurando que es una de las dinámicas económicas más importantes, ya que contribuye significativamente al logro de los objetivos de desarrollo sostenible.
Para la República Dominicana, la preocupación por el impacto de la COVID-19 en el sector turístico ha sido aún mayor, ya que este sector es de gran relevancia para la estabilidad económica del país. Según datos del Banco Central de la República Dominicana, en el 2019 el valor de los servicios prestados por el sector turístico ascendió a USD 7468 millones en 2019; lo que representa un 8.4 % del PIB del país. Además, el Ministerio de Turismo estima que del 2012 al 2019 la industria del turismo generó 43 mil millones de dólares en beneficio de la economía de nuestro país. De igual manera, la industria turística genera miles de empleos, esto queda evidenciado en datos del Consejo Mundial de Viajes y Turismo que muestran que en el 2018 el sector turístico generó más de 800.000 empleos, entre trabajos directos, indirectos e inducidos.
Considerando los enormes aportes económicos que el sector ha brindado a la República Dominicana, la pandemia por COVID-19 sin duda ha presentado enormes retos que han amenazado la estabilidad y prosperidad no solo del sector, sino que también del país y sus ciudadanos. Es importante resaltar que en los dos primeros meses del 2020 se registró una importante caída en la llegada de extranjeros y dominicanos no residentes. El descenso fue de 6.7 % con respecto al mismo período del año precedente. Esto sumado a la crisis del coronavirus, ha dado un duro golpe a la economía dominicana, tomando en consideración que, en el mes de julio, cuando se volvieron a abrir las fronteras internacionales, el país solo recibió 54,105 turistas, lo que según el Banco Central supone un desplome del 88.5 % con respecto al mismo período del año pasado.
Este descenso en el turismo ha puesto millones de puestos de trabajo en riesgo y ha afectado significativamente los ingresos del turismo internacional. Sin embargo, el impacto por la pandemia nos ha obligado considerar soluciones y alternativas que permitan dinamizar la actividad en este sector tan importante para el bienestar económico del país. Dentro de estas soluciones, ha sido puesto en relieve el potencial del turismo interno como una herramienta clave para ayudar a impulsar la recuperación económica de nuestro país.
A pesar de que el turismo interno siempre ha tenido un impacto positivo en nuestra economía, todavía hay mucho espacio para mejorar y aprovechar aún más los beneficios económicos del turismo a nivel nacional. En el contexto de la crisis económica por la COVID-19, se vuelve aún más importante la tarea de continuar creando e implementando estrategias concretas para incrementar el turismo interno.
Sin embargo, esta labor sólo será posible con el esfuerzo conjunto de los sectores público y privado. Debemos avanzar juntos para lograr fomentar el turismo interno a través de estrategias para impulsar incentivos y facilidades financieras necesarias, con el fin de que los ciudadanos puedan participar en actividades turísticas. Además, debemos contar con una implementación efectiva de protocolos de seguridad sanitaria ya que será imperativo que aseguremos la seguridad de cada uno de nuestros ciudadanos, así como la de los trabajadores del sector turístico.
También, este contexto de trabajo público privado de cara al turismo interno, nos da la oportunidad de fomentar el concepto de turismo comunitario, aquel que se traduce en la creación y desarrollo de iniciativas de emprendimiento para micro, pequeñas y medianas empresas. Esto, de la mano de campañas nacionales de concienciación para el apoyo de los emprendimientos locales, podría convertirse en una solución inclusiva, en especial para aquellos más vulnerables.
Como ciudadanos podemos apoyar al sector turístico, y qué mejor manera de hacerlo que disfrutando de los panoramas escénicos en cada rincón del país, las increíbles playas que nos rodean, la gastronomía, la inigualable arquitectura colonial, entre muchas otras cosas que el país nos ofrece.
El turismo es uno de los sectores más afectados a causa de la pandemia y no hay duda de que debemos replantear y reinventar las bases de nuestro antiguo modelo turístico. El turismo a nivel nacional será clave en esta nueva etapa para el sector, por lo cual será indispensable que logremos formular una respuesta conjunta para reactivar el sector que realmente considere los retos y las oportunidades que vendrán a medida de que el turismo interno se convierta en la nueva base de nuestro modelo turístico.